En verano es habitual que muchas parejas se prometan. ¿Es tu caso? ¡Enhorabuena! Lo primero en lo que una recién prometida empieza a pensar es en el lugar de la ceremonia, su precioso vestido y el precioso entorno del banquete. Sin duda, contratar los espacios es el punto que habitualmente suele causar más problema y requiere más antelación, pero si quieres que todo sea perfecto, las invitaciones también deben serlo.
Sin duda alguna, la invitación es la primera impresión que los invitados tendrán de vuestra boda y, por tanto, son una carta de presentación. Además, seguro que queréis guardar una invitación de recuerdo para el resto de vuestras vidas. ¿Quieres acertar con su elección? ¡Toma nota de estos consejos!
Sí, sé que somos muy pesados con la temática de la boda, pero si queréis sorprender es un requisito imprescindible. Antes de tomar cualquier decisión acerca de la boda debéis establecer la temática y el diseño general que queréis que tenga, ya que influirá en absolutamente todos los aspectos del gran día. ¿O acaso imaginas una preciosa boda de estética moderna en una masía clásica? Del mismo modo, si diseñamos una invitación marinera, no tendrá sentido celebrar la boda en la montaña.
¿Ya tenéis clara la temática? Estupendo, ahora deberemos buscar el estilo de invitación que queremos. Antes de elegir un diseñador o un proveedor, deberemos buscar qué estilo es el que más nos gusta y más se adapta a nuestra temática. Existen multitud de ellos: clásicos, con acuarelas, do it yourself, rústicos, inspirados en pasaportes o billetes de avión… En nuestra cuenta de Pinterest encontrarás algunas ideas, pero te aseguramos que hay infinitas opciones.
El típico tarjetón de bodas ya no es la única opción disponible en el mercado. En la actualidad, encontramos invitaciones con una variedad de formas inimaginable. Círculos, rombos, triángulos… pero no se limita únicamente a formas planas. ¿Qué te parece enviar tu invitación dentro de una preciosa caja que podrán guardar los invitados y utilizarla a diario? O quizás el comecocos os trae buenos recuerdos y lo preferís de este modo. ¿Buscas algo todavía más original? Si celebras una boda viajera, puedes enviar un mapa a modo de invitación, o un mensaje en una botella. ¿Eres una apasionada de la fotografía? ¡Atrévete a plasmar tu invitación dentro de un carrete! Algunos novios incluso han decidido enviarla impresa en un paquete de arroz para que luego los invitados lo lancen a la salida de la iglesia.
No, no nos hemos vuelto locos. Si habéis entrado en Pinterest, habréis podido ver la inmensidad de formatos y modelos de invitaciones que existen. Cada vez es más habitual ver invitaciones en madera, tela o acrílico. También encontramos opciones muy divertidas, como crear un puzzle a partir de nuestra invitación para que sean los invitados los que la construyan y descubran poco a poco todos los detalles. ¡No lo olvidarán seguro!
También es cada vez más habitual acompañar la invitación de otros elementos de decoración. Uno de los ejemplos más habituales es una ramita de lavanda o de olivo, pero las opciones son, una vez más, infinitas. Puedes añadir unas semillas para que vuestros familiares y amigos os ayuden a cultivar vuestro amor desde ese momento. Las pequeñas figuras de madera con la fecha y los nombres grabados son también muy habituales, y ofrecen una personalización total.
Recopilemos. Ya tenemos claro el diseño que queremos darle a nuestra invitación y el soporte en el que queremos entregarla. El siguiente paso es decidir si queremos utilizar una plantilla standard que se adapte a lo que buscamos y, simplemente, mandarla a imprimir o si, por el contrario, preferimos tener un diseño personalizado.
Si eres una persona mañosa (y tienes tiempo), puedes hacer tú misma el diseño y después enviarla a imprimir. Si buscas algo más profesional, existen multitud de artistas que se dedican a diseñar invitaciones de boda personalizadas al 100% a los gustos de la pareja. Busca un profesional especializado en el estilo de invitaciones que busques y pídele información. Aunque habitualmente la gente piensa que las invitaciones personalizadas son únicamente con caricaturas de los novios no tiene por qué ser así. Lo ideal es concertar una cita y contarle qué es lo que tenéis en mente. Aunque es cierto que suele incrementar el presupuesto, muchos de estos profesionales tienen precios asequibles y harán una invitación única para vosotros. Como siempre, se trata de buscar y buscar hasta que encontréis el que mejor se adapta a vosotros.
Una vez el diseño está terminado, ha llegado el momento de imprimir las invitaciones. Aquí, deberemos valorar el tipo de acabado que buscamos. Por supuesto, el soporte será un punto básico: ¿papel fotográfico o mate? ¿de qué gramaje?… pero esto no acaba aquí. ¿Quieres letras en relieve? ¿O quizás troquelar la invitación para que quede más original y elaborada? ¿Algunas letras brillantes que destaquen? Ten todas estas opciones en cuenta a la hora de pedir presupuesto, ya que determinarán el precio final de las invitaciones.
Mi recomendación es que encarguéis toda la papelería de la boda al mismo proveedor. De este modo, tanto las invitaciones como las minutas, el seating plan y el programa de la ceremonia tendrán el mismo diseño y crearán una sensación de coherencia y elegancia. ¡Seguro que a vuestros invitados les encanta! Además, lo más seguro es que os ofrezcan un precio más ajustado que si lo contratarais por separado.
A la hora de decidir el material y la forma de las invitaciones, es imprescindible tener en cuenta si entregaremos las invitaciones en persona o por correo postal (o, incluso, por correo electrónico), ya que Correos tiene en cuenta el peso y el volumen de los sobres y paquetes que enviamos y, si son muy grandes o pesados, pueden aumentar notablemente el presupuesto.
Recuerda también que es muy importante mantener la coherencia en el diseño de toda la boda para no saturar a tus invitado y lograr que lo recuerde como algo con sentido.
¡Ánimo, con estos consejos seguro que aciertas! Recuerda que puedes compartir con nosotros todos los detalles de tu boda a través de Facebook. ¡Estaremos encantados de ver el resultado!
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