Cómo redactar las invitaciones de mi boda

Seguimos con nuestros posts sobre temas que normalmente preocupan a las parejas que preparan su boda. Hoy, nos centramos en cómo redactar correctamente las invitaciones de boda sin que falte absolutamente nada. En un post anterior ya te contaba algunos trucos y consejos para elegir vuestras invitaciones de boda perfectas. Ahora quiero ir un paso más allá y ayudarte a redactarlas, ya que sé que es un paso muy complicado.

Información básica que debes poner

Una invitación de boda es, ante todo, una forma de informar a todo el mundo de lo que vamos a celebrar. Por ello, y tan importante como decir que os casáis, es dar algunos datos básicos que vuestros invitados necesitarán para acudir. Aquí te dejamos una lista con las cosas que no pueden faltar:

  • Nombre de los novios. Es imprescindible que proclaméis a los cuatro vientos que OS CASÁIS. Además, si no lo especificamos, es muy posible que algún invitado reciba más invitaciones y meses más tarde no recuerde de quién era cada una.
  • Fecha y hora de la boda. Por supuesto, nuestros invitados deben saber qué día reservarnos y a qué hora acudir. Te recomiendo que esta información aparezca en una tipografía grande para que de un solo vistazo puedan verlo.
  • Lugar de celebración. Al igual que la fecha y la hora, si no les decimos dónde acudir no podrán hacerlo. En caso de que celebréis la ceremonia y el banquete en distintos lugares, puede ser buena idea poner la hora estimada para cada parte de la celebración.
  • Si establecéis algún código de vestimenta, es recomendable especificarlo en la invitación. Si habéis decidido celebrar una boda ibicenca o temática, este es el lugar adecuado para pedir a la gente que vista de blanco o se disfrace.
  • En caso de que sea una boda «solo para adultos» también es obligatorio que lo especifiques en la invitación. De lo contrario, las familias suelen interpretar que los niños también están invitados. Sigue leyendo, ya que más adelante te damos algunos consejos para hacerlo.
  • Datos de contacto para confirmar su asistencia. Para organizar la boda es muy importante saber con cuánta gente contamos. Por ello, necesitaremos que cada invitado nos confirme su asistencia. Lo más habitual es que ya sepan cómo contactar con nosotros, pero si les facilitamos nuestros datos de contacto evitaremos sustos y excusas. Todos conocemos a alguien a quien le han robado el móvil y ha perdido todos sus contactos, por poner sólo un ejemplo. En caso de que sea vuestra Wedding Planner quien gestione las confirmaciones, también podéis añadir directamente su contacto.
  • Recordatorio de restricciones alimentarias. Aunque no es algo que se añada de forma habitual, para mí es algo imprescindible. Con los nervios de la boda es muy fácil que no recuerdes que alguien era celíaco o intolerante a la lactosa (o incluso, ¡que está embarazada!), y esta información es básica para el banquete. ¡Ayúdales a recordar que te lo digan! Además de las alergias e intolerancias, cada vez hay más vegetarianos y veganos, por lo que es muy importante asegurarnos de que no vayan a tener problema con el menú. Alguna frase como «Para nosotros eres muy especial, y por eso queremos asegurarnos de que todo sea perfecto. Si hay algo que no puedas comer, avísanos para que lo solucionemos antes de tener un susto. ¡Muchas gracias!».

Información adicional

Más allá de esta información básica, hay más información que podéis elegir añadir y ayudará mucho a vuestros invitados.

  • Mapa de acceso al lugar de celebración. Generalmente, las masías que tan de moda están para celebrar las bodas se encuentran fuera de la ciudad. Por ello, un pequeño mapa donde se muestre cómo llegar puede ser muy útil para evitar que los invitados se pierdan y se retrasen. Otra opción cada vez más extendida es poner las coordenadas GPS para que el móvil les indique cómo llegar. Según cómo sean nuestras invitaciones, podemos añadir el mapa en la propia invitación o en una tarjetita a parte.
  • Horario de los autobuses para invitados, en caso de que los haya. De este modo, cada persona puede decidir si hay un horario que se acople a sus necesidades o si necesita acudir con su propio coche. Ten en cuenta que, por lo general, se ponen 2 autobuses de regreso: uno temprano (especialmente para quienes acuden con niños o gente mayor) y uno al final de la fiesta. Es posible que algunas personas deseen quedarse a la fiesta pero no al final. Si ya saben los horarios del autobús, podrán organizarse y no tendrán que elegir entre todo o nada.
  • Fecha tope de confirmación. Normalmente, los invitados tienden a dejarlo todo para el último momento. Aunque no es habitual, puedes ponerles una fecha límite si necesitas que te confirmen con antelación su asistencia. Pregunta al salón cuándo debes confirmarlo y fija la fecha en base a ello.
  • Alojamientos cercanos. Esto es importante en caso de que algún invitado venga de lejos. Ya sea en la misma invitación o en una tarjeta separada, puedes recomendarle algunos lugares para dormir cerca del lugar de celebración. ¡Seguro que te lo agradece!
  • ¿Número de cuenta? Si hay un tema controvertido por excelencia en las invitaciones de boda, es sin duda alguna éste. ¿Debo poner el número de cuenta para los regalos o no? Desgraciadamente, no existe una respuesta perfecta. En algunas zonas de España esto es más habitual y no está tan mal visto, pero en otras resulta chocante para los invitados. ¿No sabes cómo hacerlo? Sigue leyendo, más adelante te daremos algunas ideas por si decides ponerlo.

¿Cómo escribirlo?

Tradicionalmente, la invitación a una boda la hacen los padres de los novios. Lo más habitual era situar los nombres de los padres en la parte superior y el nombre de los novios después en la parte central. Por supuesto, las cosas han cambiado y no es necesario mantener esta estructura. Podéis hablar de forma directa a vuestros invitados sin esta fórmula tan formal.

Cada pareja es única, y vuestra forma de hablar con vuestros seres queridos también lo es. Seguro que cuando os pongáis a redactar las invitaciones ya sabéis cómo será el estilo de la boda y de las invitaciones. En base a ello, no te resultará difícil ver si debes utilizar un lenguaje más formal o más informal.

¿Todavía lo ves difícil? Mira una foto de algunos de tus invitados y piensa cómo se lo dirías cara a cara. Si, por ejemplo, siempre hablas con ellos de broma, no tiene sentido que el texto de tu invitación sea demasiado formal.

Para que te inspires, te dejamos algunas frases que puedes adaptar.

Divertido:

El día XXX no estaremos en casa. Sin embargo, nos podrás encontrar en la iglesia XXX de la calle XXX a las XX hs. Allí XXX entrará vestida de novia mientras XXX la espera en el altar donde, según nos dijeron, se convertirán en marido y mujer. ¡Esperamos tu presencia!

Formal:

XXX y XXX tenemos el placer de comunicarle nuestro próximo enlace matrimonial. Por ello, le invitamos a usted y a su familia a la ceremonia que tendrá lugar el próximo día XXX a las XXX horas en XXXX. Por favor, confirmen su asistencia.

Romántico:

Ya sabes que XXXX y XXXX nos complementamos a la perfección. Desde que nos conocimos, todo cobró sentido. Con solo mirarnos a los ojos, sabemos que podemos superar cualquier cosa. Después de tantos años, tantos buenos y malos momentos juntos, hemos decidido que ya es hora de dar un paso más y ¡nos casamos! Coge tu agenda y apunta el día XXXX. A las XXX horas te esperamos en XXX. Sin tu presencia, esta celebración del amor no será lo mismo. ¡No faltes!

Si tenéis hijos:

¡Hola! Soy XXX y te escribo para contarte que mi papá XXX le pidió a mi mamá XXX que se casara con él. Mamá le dijo que sí, y el día XXX a las XXX horas lo celebraremos todos juntos. Me han dicho que habrá una gran fiesta, por lo que no podéis faltar.

Otras opciones:

¿La escritura no es lo tuyo y todavía no sabes como redactarlo? ¡Haz una infografía! En internet encontrarás un montón de ejemplos preciosos. Además, es una opción perfecta para unas invitaciones más gráficas y divertidas. Sólo tendrás que buscar dibujos que vayan acorde a la información.

Otra opción son las famosas invitaciones en forma de tarjeta de embarque o entrada de cine. Únicamente tendrás que poner los datos en modo formulario y arreglado.

Por supuesto, si no quieres complicarte puedes contratar a alguna empresa especializada que la diseñe por ti. ¡Te aseguro que si eliges bien el resultado será espectacular!

Problemas habituales

Como ya te he adelantado, hay algunos puntos «conflictivos» que muchas veces no sabemos afrontar. Aquí te dejo algunas ideas para resolver estos pequeños problemas. Como siempre, te aconsejo que las uses de inspiración y las adaptes a vuestro estilo de boda y a vosotros.

¿Cómo poner el número de cuenta?

Sabemos que es el punto que más problemas genera, ya que los novios no saben muy bien cómo decir que prefieren recibir dinero en lugar de cualquier otro regalo. Antiguamente, la boda coincidía con estrenar la casa, por lo que necesitaban menaje, electrodomésticos… Hoy en día, lo habitual es que los novios lleven años viviendo juntos y necesiten cubrir los gastos de la boda.

Cada vez se ha vuelto más habitual que faciliten su número de cuenta a los invitados para evitar perder los famosos sobres con dinero. Además, a los invitados también les puede resultar más cómodo hacer una transferencia y no preocuparse ese día por nada.

Si habéis decidido que esta opción es la que mejor se adapta a vosotros pero no sabéis como exponerlo, aquí te dejamos algunas frases de inspiración que te pueden ayudar.

Empezamos por lo más habitual. Tu mejor regalo, nuestra luna de miel. Esta frase, seguida del número de cuenta, se ha convertido en un clásico de muchas invitaciones. Por supuesto, se puede redactar de muchas maneras diferentes. ¿Quieres otro ejemplo? El mejor regalo que nos podías hacer es compartir este día con nosotros. Si aún así quieres hacernos otro regalo, nos encantaría que nos ayudaras a cumplir nuestro sueño de ir a XXX de luna de miel. Gracias.

Por supuesto, la luna de miel no es lo único con lo que os pueden ayudar los invitados. ¿Estrenáis casa junto con la boda o vais a ser papás? Podéis añadir algo así como Gracias por compartir con nosotros el inicio de nuestra vida en común. Si quieres hacernos un regalo, nos encantaría que nos ayudaras a preparar nuestro nidito de amor para todo lo que está por venir.

Si no queréis especificar ningún «destino» para el dinero, podéis usar algo más estandard. Por ejemplo, El regalo es opcional, pero la asistencia obligatoria. Si aún así quieres hacernos un regalo, te agradeceríamos que nos lo dejaras en la cuenta XXX.

Si queréis ponerlo pero pensáis que ciertas personas pueden sentirse ofendidas, podéis añadir esta frase y el número de cuenta en una tarjeta separada. De este modo, únicamente tendréis que eliminar la tarjeta de la invitación destinada a estas personas. Para mí esta es la opción ideal, ya que os permite ofrecer distintas opciones según el tipo de invitado. Para mí boda, preparamos dos tipos diferentes de tarjetas según el invitado: una con el número de cuenta y otra con la información de nuestra lista de bodas. En casos más especiales (como, por ejemplo, nuestros padres o abuelos) no añadimos ninguna y tratamos el tema personalmente.

¿Cómo decir que queremos una boda sin niños?

A pesar de que los niños siempre llevan alegría allá donde van, es muy cierto que en una boda pueden llegar a ser un engorro. Especialmente en bodas de noche, están cansados, se aburren y tienen sueño. ¿El resultado? Los padres terminan decidiendo irse antes para evitar que los niños molesten al resto de invitados o que lo pasen mal. Además, si queremos que no se aburran tendremos que contratar un servicio de animación infantil, lo que puede encarecer el presupuesto.

Naturalmente, decir a los padres que sus hijos no son bienvenidos es un tema muy delicado. Por ello, nuestro primer consejo es que evitéis las frases negativas. Para nuestro cerebro no es lo mismo escuchar (o leer) «niños no» que «sólo adultos». El mensaje es el mismo, pero el cerebro lo interpreta de forma mucho más suave si evitamos las negativas.

Si no quieres ser tan tajante, puedes explicar a tus invitados los motivos por los que habéis tomado esta decisión. De este modo, comprenderán que no es que no aceptas a sus hijos. Eso sí, evita expresiones como «sin preocupaciones». Los invitados pueden interpretar que os preocupa que los niños molesten o estropeen algo y sentirse ofendidos. Además, seguro que os rebaten que aunque no estén se preocupan igual por ellos.

Un ejemplo podría ser: Para nosotros es un día muy especial que queremos compartir con vosotros. Esperamos que disfrutes de este día tanto como nosotros, y por eso hemos tomado la decisión de que sea sólo para adultos. Así podréis bailar hasta el amanecer y brindar con nosotros. Esperamos que lo comprendas y celebres con nosotros el amor. 

Otra opción puede ser no poner nada en la invitación y decirlo cuando se la entreguéis. De este modo, podréis razonar con ellos los motivos y verán que no es nada contra sus hijos. Eso sí, evitad hacedlo por mail o Whatsapp, ya que al no tener información no verbal se suele malinterpretar.

Sea como sea, podéis estar seguros de que algunos padres lo comprenderán y otros se ofenderán. Sea como sea, mantente firme en tu decisión y no hagas excepciones. Si un padre ha renunciado a llevar a su hijo y ve niños en la boda, se enfadará y pensará que tienes algo en contra de sus hijos. ¡Y con razón!

Espero que estos consejos os ayuden a redactar vuestras invitaciones de boda. Como siempre, os animo a contactar conmigo si os ha quedado alguna duda. También podéis entrar en mi cuenta de Pinterest para insipiraros. En el próximo post hablaremos de las características especiales de las bodas en destino. Así que si habéis decidido celebrar una Destination Wedding, ¡estad muy atentos!

¿Ya habéis escrito vuestras invitaciones de boda? ¡Me encantaría que compartierais vuestros textos! Como siempre, ¡avísame si crees que me he dejado algo!

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